Tener un hijo es una acción, un desarrollo y un resultado, siempre humano, lleno de coherencias, felicidades, tristezas y mucha paciencia. Creo haber aprendido después de sus 16 perídos de tiempo que la vida tiene padres como yo , conversadores, humoristas sin fin ,pero siempre con respeto mutuo, con amor por encima de malos momentos, sumamos más que restamos, pero con ojos, oídos, pecepciones y tactos autocríticos, por ello, no olvido como actuaba yo en mi pubertad, mis reveliones sin causa, mis tonos agresivos contra mi ETE, mis caminos oscurecidos por las tormentas que me producían los "amigos" y la FAMILIA que más que ayudarme , no tenía más respuestas que las que todos repiten , sintiendose PEFECTOS.
Mi hijo en cambio tiene un padre tan inperfecto como él, tan amoroso como él , a pesar que siempre me negaron besos y abrazos (mi madre tenía miedo de sentirse debil al dar besos o abrazos), tán lleno de humor como en momentos terriblemente aburridos. Pero eso aprendí con su nacimiento, con su desarrollo como ser humano, conversaciones y aclaraciones que ahora apoyan su crecimiento y me inspiran seguir aprendiendo , despejando dudas, preguntas y respuesta que nunca me dieron ... yo en cambio tengos más que tiempo, ganas de ser un padre inperfecto, pero con uan fuerza amorasa, única irrepetible,pero que infleuncia en la vida de una persona tan cercana como mi hijo ...
No hay comentarios:
Publicar un comentario