Con la ausencia del sol y la llegada de las lluvías otoñales termina el verano que reune a personas alrededor de un círculo significativo, aquí pasaba el Muro de Berlín, aquí era "tierra de nadie". pero desde hace mas o menos tres años un irlandés empezó a organizar de forma espontánea, "EL Karoke del Parque del Muro", convirtiendolo en sensación citadina y turística, acabando con la conotana burocracia alemana que mide todo a través del papel, aqúi llegan los pasantes ,los domingos dejando con sus improvisizaciónes liricas un pedazo de sí y convirtiendolo en un fenómeno que ha cambiado la vida cultural de Prenzlauer Berg, un sector poblado por la más alta rata de nacimiento en Europa y al mismo tiempo, punto de visita obligada de los turistas que pasan por ésta metrópolis.Prenzlauer Berg era lugar de creativos, contrarevolucionarios, punks, verdes, artistas, y trabajadores comunes que beben su cerveza en mano sin temor y con orgullo al respirar tanta tolerancia, incluso sexual, ya que aquí nacieron inmurables movimiento que decidieron la caída del Muro de Berlín y alentaron la "revolución espontánea" en ciudades como Leipzig o Dresden.
El Parque del Muro se ha convertido en un encuentro natural de pensamientos, música,ventorrillos ambulantes de latinos, africanos, asiaticos y todos aquellos que quieren de una forma u otra dejarse ver y ver como y cuando empiezan los cambios que dicta Berlín, para hoy, para su futuro.
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