Son pocos los berlineses que repiran en ésta ciudad de cambios constantes, entre ellos Wolfgang, que de las calles de Wedding permitió su desarroolo personal en las calles y comenzó su vida deportiva, activando lo que después será para él su larga vida de deportista.El muro de Berlín no se había levantado, pero mi suegro ya tenía preparado sus puños para el boxeo callejero y luego para levantar kilos de hierro ,convirtiéndose en un prominente "alzador de pesas" y moviendóse entre una ciudad que se dividiría en dos sistemas paralelos y de observación (rusos, americanos ,francesesy británicos)hasta llegar la absoluta división en 1961, en que la vista de la Puerta de Brandergurgo tendría la panorámica de una pared divisoria con personas que hablaban una misma lengua y los dividían desde afuera a sus antojos.
Wolfgang, se dipersó entre la gastronomía de la antigua República Democrática Alemana y su capital, Berlin viviendo una vida privilegiada , envuleto entre festejos de los que estaban o no con el régimen, pero olvidando, a través del alcohol y su diversión la realidad gris de un sistema que oprimía por dentro y se mostraba solidarios con los pueblos orpimidos por fuera. Lugares que con el tiempo han desaparecido , pero que con la luz de sus sobrevientes, aún se mantiene en la historia de los que las oímos con interés, lo que dejó el pasado reciente.
En la niebla de los berlineses de Prenzlauer Berg queda, LSD(Lychenerstr.,Schillimerstr y Duckerstr.) , tres calles que por su nombre es un punto de encuentro de los intelectuales y artistas que quedan,hoy ocupado por muchos habitantes que provienen de la "Selva Negra", sur de Alemania, extranjeros que vienen de todas partes del mundo a revivir la estampa añorada de un sistema comunista obsoleto y discriminatorio contra todo lo humano. Pero el sobreviente , el camaleón es sabio y se trepa en la mejos rama ,cuando el agua el fuego llega al tope.
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